viernes, 3 de diciembre de 2010

Volunteer

- ¿Y bien, algún voluntario?

Silencio. Una mano se alza al fondo de la sala. Sorprendidos se encuentran pares de ojos. Las bocas susurran, cerca, muy cerca de los oídos.

- ¿Sí?

Silencio otra vez.
Agudo, estridente, molesto.

- Disculpe, ¿a qué hora dijo que podíamos irnos?

3 comentarios:

Pez Susurro dijo...

sencillamente...


GENIAL


(muy tu)

:)

besos (muchos)

maria dijo...

Venga hombre que tenemos el culo cuadrao... XD genial besitos

Anónimo dijo...

Fui testigo más de una vez de situaciones así. La sesión de preguntas y respuestas al final de una mala conferencia o de una tediosa clase, se reume al "hey. ¿ya podemos irnos de aquí?". Eso si, en el inter hay un suspenso estilo Hitchcok, Hickory Dickory Clock. Saludos.