Dialogo con mi cuerpo
qué parte
se rendirá primero
Soy estatua muda que avanza
incrédula de las palabras
todas
y del mundo que proyecta la retina.
No me siento,
Papá.
Lamento mucho ser sólo charcos que observan,
y consumirme a la velocidad con que recuerdo.
Me equivoqué tanto,
Papá.
Despierto y trato de ubicarme,
acerco mi cara al espejo para
comprobar
que estoy despierta.
En mi cuerpo hay algo que
aún palpita
cuando miro alrededor
Horrorizada
Los árboles
las plazas
los niños
Y comprendo que
todo está en movimiento todo
continúa como hizo ayer
como hará mañana
Y yo, estatua muda
me pregunto
Quién permite éste descaro
cómo es posible que
acepten
la ausencia el vacío que se crea
y por qué
no están llorando